La adolescencia en los gatos
La adolescencia, una fase sensibleLas principales etapas del desarrollo conductual del pequeño felino son el periodo prenatal, el periodo neonatal, el periodo de transición, el periodo de socialización, la pubertad y la maduración social.
La adolescencia en los gatos abarca tanto la pubertad como la maduración social. Esta ventana temporal puede considerarse como un nuevo nacimiento en el que el gatito cambia de aspecto y temperamento. La pubertad se produce entre los seis y los doce meses, dependiendo del tamaño del gato, mientras que la maduración social tiene lugar entre el año y medio y los tres años de edad.
Dos partes del cerebro, el hipotálamo y la hipófisis, desencadenan la pubertad estimulando la producción de hormonas sexuales masculinas y femeninas. El estrógeno y la testosterona inducen la aparición de nuevos comportamientos en los gatos, como la actividad reproductora y el marcaje urinario. La maduración social, por su parte, estabiliza las características emocionales y cognitivas de la personalidad del gato.
Adolescencia y emociones
Durante la adolescencia, es posible que observes cambios significativos en el comportamiento de tu gato. En este periodo, tu gato empezará a mostrar una curiosidad e impulsividad recién descubiertas. Esta fase está marcada por experiencias emocionales intensas, incluida una mayor liberación de dopamina, que puede conducir a decisiones impulsivas.
Por este motivo, la adolescencia puede considerarse el periodo en el que las fragilidades de comportamiento del pequeño felino salen a la luz de forma llamativa.
Todo lo que no se construyó previamente sobre cimientos sólidos durante el crecimiento tiende a derrumbarse. Por ejemplo, un gatito que se ha encontrado ocasionalmente con humanos empezará muy fácilmente a esconderse cuando lleguen invitados; o una relación con los padres de la mascota basada en prohibiciones puede desembocar en un conflicto que el gato exprese mediante amenazas (silbidos, gruñidos), agresiones, vocalización excesiva, eliminación inadecuada o marcas urinarias.
Adaptar la dieta de tu mascota adolescente
A medida que tu gato pasa a la edad adulta, sus necesidades energéticas pueden cambiar. Por lo tanto, es esencial ajustar su ingesta calórica para garantizar un crecimiento y un desarrollo adecuados.
Para asegurarte de que tu mascota está recibiendo una ingesta adecuada de todos los nutrientes necesarios, siempre puedes contar con el apoyo del consultor nutricional de Farmina, que te ayudará periódicamente a adaptar el plan nutricional de tu gato en función de su edad y sus necesidades, y te ayudará a seguir la curva de crecimiento de tu mascota, para asegurarse de que todo funciona correctamente.
Adolescencia y esterilización
La esterilización es un procedimiento habitual que impide que los gatos se reproduzcan. La edad adecuada para llevar a cabo el procedimiento sigue siendo objeto de debate. De hecho, algunos veterinarios recomiendan proceder durante las primeras fases de la adolescencia, normalmente en torno a los cinco o seis meses de edad. Mientras que otros recomiendan esperar hasta el final del primer ciclo de celo (para las gatas), normalmente en torno a los ocho o doce meses.
No obstante, la decisión sobre si esterilizar o no a tu mascota y cuándo hacerlo debe consultarse siempre con su veterinario de confianza, teniendo en cuenta varias características, como la edad y el comportamiento del gato.
Esta intervención en machos y hembras conlleva beneficios para el individuo, ya que aumenta su esperanza de vida media (prevención de tumores mamarios en la gata y reducción del vagabundeo en ambos sexos) aunque pueda predisponer al aumento de peso y a todas las patologías relacionadas como la diabetes mellitus o la artrosis.
Dieta recomendada para gatos esterilizados
Como se ha visto anteriormente, la esterilización de las mascotas tiene algunas ventajas, pero el inconveniente es que las mascotas esterilizadas pueden tender fácilmente al sobrepeso.
Para contrarrestar esta tendencia a la baja es necesario ajustar su ingesta calórica (las mascotas en esta condición requieren menos) y eligiendo el alimento correcto.
